Benedicto XVI emprende hoy su primer viaje a los Balcanes para apoyar a las familias de Croacia y reforzar la esperanza de los jóvenes en un país que aspira a entrar ya el próximo año en la Unión Europea. El Santo Padre se reunirá hoy en Zagreb con representantes de la sociedad civil y política, y presidirá una vigilia de oración nocturna con cincuenta mil jóvenes en la plaza mayor de la capital.
El domingo celebrará la misa para más de trescientas mil personas en la Jornada Nacional de las Familias
Católicas de Croacia, y se reunirá con obispos, sacerdotes y religiosos. También rezará ante la tumba del beato Alojzije Stepinac, arzobispo de Zagreb, mártir de la represión comunista. Benedicto XVI es el segundo Papa que visita Croacia desde su independencia, después de que Juan Pablo II estuviera en ese país en tres ocasiones.
El Papa defiende que Croacia entre en la UE - EFE
El Papa Benedicto XVI ha defendido el ingreso de Croacia en la Unión Europea como «algo lógico, justo y necesario», aunque reconoció que se puede entender que sectores de la sociedad croata se muestren escépticos ante esa entrada.
Esto se debe a que Europa -explicó- «se ha convertido en un centralismo demasiado fuerte que no tiene suficientemente en cuenta la historia y la riqueza de los pueblos que la conforman».
Benedicto XVI ha asegurado que la mayoría de los croatas ve con alegría la entrada del país eslavo en la Unión Europea. El Papa también exhortó a renovar la unidad europea teniendo en cuenta las diferentes culturas y las raíces cristianas del viejo continente.
El Santo Pontífice resaltó la figura del cardenal beato Alojzije Stepinac, fallecido hace 50 años, a quien le tocó vivir durante la dictadura de las ustachas, aliados de los nazis, y después del comunismo. De Stepinac resaltó que «salvó a judíos y gitanos» y que «fue un verdadero humanista».
No hay comentarios:
Publicar un comentario