"Queridos hijos, Dios Padre me envía para mostrarles el camino de la salvación, porque Él, mis hijos, desea salvarlos y no condenarlos. Es por eso que, como madre, los reúno alrededor mío, porque. con mi amor maternal deseo de ayudarlos a ser libres de la suciedad del pasado y empezar a vivir de nuevo diferente. Los invito a revivir en mi Hijo. Junto con la confesión de los pecados renunciar a todo lo que los ha distanciado de mi Hijo y que ha hecho su vida vacía y sin éxito. Digan "sí" al Padre con el corazón y ponganse en el camino
de salvación a la que Él los está llamando a través del Espíritu Santo. Gracias. Estoy especialmente orando por los pastores (sacerdotes), para que Dios los ayude a estar junto a ustedes con una plenitud de corazón. "
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