No hubo sorpresa en Zagreb. Croacia no dio lugar a ello. Islandia se vio sobrepasada por un rival motivado y generoso en el esfuerzo que jugó más de 50 minutos con un hombre menos. Mandzukic hizo el primer tanto y se autoexpulsó, ofreciendo un hilo de esperanza al modesto combinado islandés. Lejos de amilanarse y echarse atrás, Croacia hizo el segundo por medio de Srna y pudo golear. Más que suficiente para ganarse
el billete a Brasil.
Suficiente y totalmente merecido. Jamás hubo opciones en Zagreb para una Islandia amenazada por la presión. La cita le quedó grande. Todo lo contrario que a Croacia, que tiró de galones y demostró que se ha ganado un sitio en el próximo Mundial. Fue superior con once y arrolló con diez. Un partido impecable cuando la situación lo requería.
Antes de la primera media hora de partido Croacia finalizaba su insistencia con un tanto de su goleador. Mario Mandzukic aprovechaba un remate en semifallo de Perisic para fusilar a placer en el segundo palo. No pudo hacer nada Halldorsson, gran protagonista en Zagreb. El meta islandés sacó numerosas manos que evitaron que su selección saliese vapuleada.
Y eso que se metió en el partido al filo del descanso cuando a Mandzukic se le cruzaron los cables. En un balón dividido sacó la plantilla a paseo y enfiló el camino hacia vestuarios. La roja era indiscutible.
Hallordsson evita la goleada
La pataleta absurda del delantero del Bayern hacia presagiar un segundo tiempo interesante, con Islandia quitándose los complejos y Croacia preparada para sufrir. Nada de eso. Más bien, todo lo contrario. Entre Modric y Rakitic se bastaron para agarrar el mediocampo y marcar el ritmo del partido.
Sin noticias de las estrellas de Islandia, Croacia ofreció una exhibición de fuerza física para multiplicarse por todas las zonas del campo. Se hizo con la posesión, salió al contragolpe cuando pudo y se hartó a desperdiciar ocasiones ante un Hallordsson crecido por las circunstancias. Varios mano a mano, una medio chilena de Olic al larguero... el despliegue ofensivo croata no dejó lugar a dudas. Con diez, Croacia fue infinitamente mejor. Síntoma inequívoco de que debe estar en el Mundial.
Fuente: Jaime Rincon para Marca.com
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